Los Medias Rojas de Boston y Manny Ramírez se están "cuadrando" para librar una gran batalla fuera del terreno. ¿A qué me refiero?. Sencillo: A la firma de un nuevo contrato. A simple vista, Boston debería darle a Manny todo lo que pida. Está casi llegando a los 500 jonrones y es un bateador de dinero. Como si fuera poco, en lo que va de campaña batea .326, con siete jonrones y 24 remolcadas. Ahora bien; ¿Cuál es el problema?. Manny cumplirá 36 años de edad el próximo 30 de mayo. El gana 20 millones de dólares por año y hay dos opciones de 20 millones cada una. Fuera sencillo tomar esas dos opciones por 40 millones y Ramírez terminaría con 38 años. Ahora bien, Ramírez contrató a super agente Scott Boras. El mensaje es que Ramírez quiere el último contrato de su carrera. Es decir, un pacto de cuatro años, llegar a los 40 y ahí quizás retirarse. Con un jugador tan cambiante como Manny, es difícil embarcarse en un contrato de cuatro años y 80 millones. Eso indica, que cuando se produzca el "forcejeo" lo más probable es que Boston lo deje partir. Visto así, podríamos estar viendo los últimos palos de Ramírez con el uniforme de Boston.
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